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Jaime Davidovich

<strong>Jaime Davidovich</strong> Jaime Davidovich en Bilbao. Conferencia: Jueves 14 de Julio 19 h en Galería Vanguardia. Alda. Mazarredo. Exposición hasta el 20 de julio.

La obra de Jaime Davidovich se desarrolla en los fervientes años que van desde finales de la década de 1950 hasta la actualidad, y principalmente entre Argentina y los Estados Unidos.
Para esta su primera individual en nuestro país, además de fotografias manipuladas y collages de la época de los 70 se presentan proyectos audiovisuales de diferentes épocas para acercarnos un poco más a la dilatada carrera artistica de Jaime Davidovich. Comenzó comopintor para pasarluego a hacer instalaciones con cinta adhesiva y de la cointa adhesiva se pasó a la cinta de video. Creaba videos que combinaba con performance. El video le llevó luego a trabajar con la televisión. Esta es la parte de su trabajo que aquí más nos interesa:

A pesar del éxito obtenido con sus video y video instalaciones Jaime Davidovich decide dar un nuevo giro en su carrera, convencido de que el medio natural para el video arte no estaba en los museos y las galerías sino en la televisión de alcance reducido.
En aquella época, los video tapes se veían en televisores ubicados en pequeñas salas de museos y galerías de arte, en las que se disponían sillas para los eventuales espectadores. Davidovich notaba una gran contradicción en esta práctica: si los espectadores del museo contemplaban las obras en la misma posición de receptividad pasiva que adoptaban en sus hogares frente a su televisor, no tenía sentido sacarlos de la comodidad de sus viviendas. Por otra parte, la distribución a través de los circuitos artísticos convencionales transformaba al video arte en una variante actualizada de las formas artísticas tradicionales, dificultando su difusión a mayor escala.
La popularización de las emisoras de cable en los setentas dio la posibilidad a los artistas de acceder al espacio televisivo a un costo no demasiado elevado. En 1976,junto con otros artists Jaime Davidovich funda Cable SoHo y se transforma en su primer director de programación. Un año más tarde, es miembro fundador de la Artists Television Network (ATN), una institución orientada a la difusión de las artes y las obras de los artistas por televisión, de la que es director entre 1977 y 1983.
En 1978, Davidovich produjo para la ATN, SoHo Television, un programa transmitido por Manhattan Cable TV y Teleprompter Cable TV. Al año siguiente comenzó The Live! Show, un programa semanal transmitido por el Canal J, espacio de acceso público perteneciente a la primera emisora.
SoHo Television era un programa basado en entrevistas informales, donde los artistas invitados dialogaban con un entrevistador sobre sus respectivas obras. En general, los invitados pertenecían a la vanguardia artística norteamericana en el campo de la performance, la video creación o la televisión alternativa. A lo largo de su programación, SoHo Television recibió la visita de artistas de la magnitud de John Cage, Laurie Anderson, Vito Acconci, Dennis Oppenheim y Les Levine, por nombrar sólo a algunos.
En muchos casos, los artistas mostraban su obra o la componían en vivo para la audiencia, como fue el caso de una de las participaciones de John Cage. En otros casos, no era un artista el invitado, sino un grupo de artistas o un crítico u otro representante del circuito artístico, que discutían sobre las problemáticas que atravesaban el arte contemporáneo. En este sentido, deben destacarse los programas dedicados a analizar los Conceptos de Tiempo y Espacio, moderado por Dore Ashton, las Perspectivas de la Vanguardia, a cargo de Robin White, o El Cambiante Rol de los Museos de Arte, programa a cargo de Gregory Battcock.
Desde su mera descripción, es evidente que SoHo Television estaba dirigido a una audiencia específica. Sus emisiones buscaban generar un espacio de reflexión sobre la actividad artística de su tiempo, con seriedad y sin subestimar el nivel intelectual de los espectadores. Cada programa constituía un acercamiento del público a las discusiones más actualizadas en el campo de la creación estética, un espacio para que los artistas pudieran acceder a una audiencia amplia y un intento renovado por acrecentar el protagonismo del arte en los medios de difusión masiva.
Los programas estaban estructurados, en general, sobre largos bloques registrados en tiempo real, sin efectos y con un mínimo de variaciones en las posiciones de cámara. En todo momento se privilegiaba la presencia del invitado, la exhibición de su obra y el desarrollo de la discusión. Con esto se buscaba cumplimentar con dos objetivos, que el propio Davidovich ha descrito en estos términos: "Lo que intentamos hacer, es dar a los artistas de vanguardia una vidriera de primera clase, y al mismo tiempo, generar una audiencia que pueda apreciar su obra".
The Live! Show era un programa bien diferente, y en algunos aspectos prácticamente opuesto al anterior. Su estructura estaba compuesta por segmentos independientes, a la manera de un show de variedades, en los que una serie de personajes asumían la tarea de realizar una aguda crítica a la televisión comercial. Si SoHo Television fue una mirada de la televisión sobre los artistas, The Live! Show era la mirada de un conjunto de artistas sobre la televisión.
Todas las emisiones de The Live! Show hacían gala de una gran comicidad, producto principalmente del histrionismo de sus personajes. El hecho de tener que realizar una crítica a la televisión desde un espacio televisivo hizo que la mayoría de los segmentos estuvieran conformados por sátiras a los formatos más consolidados, ejecutadas con gran sutileza y un inteligente sentido del humor.
Un elemento fundamental de The Live! Show fue su condición de programa realizado "en vivo". A esto se debió que muchas de sus propuestas contemplasen la participación de los espectadores a través de la comunicación telefónica, lo que se iba a potenciar algunos años después en un programa experimental realizado utilizando la tecnología QUBE (ver más adelante).
Como la televisión es ante todo servicio, he aquí algunos de los "servicios" que ofreció The Live! Show para su audiencia: un psiquiatra rocanrolero, interpretado por el músico Paul McMahon, que transmitía el diagnóstico y tratamiento para los problemas que planteaban los televidentes a través de canciones; un doctor especializado en problemas de adicción televisiva, el Dr. Videovich, "egresado de la Universidad de Buenos Aires, donde estudió cómo manipular los medios con profesores alemanes" (tal era su presentación); un espacio de opinión a cargo del pintor John Torreano, quien recitaba monólogos sobre hechos recientes, relevantes o irrelevantes, del ámbito artístico; una sección de venta telefónica de "videokitsch", una línea completa de productos basados en el aparato televisivo; lecciones de arte a cargo de Jaime Davidovich, en las que se solía describir la realización de un dibujo pero rara vez qué debía hacerse para lograrlo; entre otros importantes y útiles servicios.
A las secciones fijas se agregaban los sketches realizados por los artistas invitados y, eventualmente, obras de video arte. Los segmentos estaban divididos por los comerciales que promocionaban los diferentes componentes de la línea de "videokitsch", o por Tee Vee, The Poor Soul of Television (Tee Vee, la Pobre Alma de la TV), una historieta protagonizada por un televisor antropomorfizado que frecuentemente se sentía incomprendido, desaprovechado o incompletamente integrado al entorno familiar. Era común la utilización de efectos visuales, como colorizaciones o inserciones de imágenes, que muchas veces eran comentados por los espectadores en sus intervenciones al aire.
Las participaciones del público generaban frescura y dinamismo. Por momentos conducían a los personajes hacia situaciones imprevistas o desopilantes. "Estoy acostumbrado a mirar televisión en el baño, pero aún no se como evitar los choques eléctricos al ducharme", consultaba un televidente, mientras otro hacía pública su preocupación ante una posible sobredosis de Mary Tayler Moore. Las respuestas no eran menos delirantes que las preguntas: "Hagan cualquier cosa con su televisor pero no lo rompan, ya que deberán comprar uno nuevo, las empresas productoras ganarán más y aumentará la programación televisiva debido al aumento de la demanda" aconsejaba el Dr. Videovich en otra oportunidad.
En 1980, trece programas de The Live! Show fueron presentados en Columbus, Ohio, ciudad en la que se estaba experimentando un sistema de televisión conocido como QUBE. El QUBE era un sistema interactivo diseñado para promover la participación de los televidentes. Constaba de una consola con cinco botones inserta en el selector de canales del televisor que emitía señales a la emisora. Cuando se oprimía un botón, la señal era procesada en una computadora y transmitida al aire, traducida en porcentaje sobre la participación total. El resultado de la participación de los televidentes se veía en tiempo real sobre la pantalla, y respondía a las opciones previamente estipuladas por quien, desde la programación, generaba la consulta.
Tras la emisión de los programas de The Live! Show, Davidovich se trasladó a los estudios de QUBE para recoger las opiniones del público en relación a los programas, e intentar un nuevo tipo de interacción con los espectadores, en un capítulo que denominó SoHo Wants to Know. Su objetivo era, por un lado, utilizar este dispositivo como herramienta de creación; por otro, mostrar las limitaciones de ese sistema de votaciones, "grado cero de la democracia", como lo bautizara irónicamente el crítico francés Jean-Paul Fargier.
Para lograr el primer objetivo, Davidovich diseñó dos propuestas de participación: "La primera confiaba a la audiencia las decisiones básicas sobre el video -la imagen, los efectos de sonido y el color dominante- mientras los técnicos del canal agregaban algunos efectos visuales. El público votó que Carole Stevenson (conductora del programa) estuviera en la imagen, que el color de base fuera el azul y que hubiera música clásica con flautas como sonido de fondo. Todas estas decisiones fueron acogidas a partir de una serie de opciones. El segundo experimento consistió en que un televidente diera instrucciones telefónicas a los técnicos del estudio sobre el uso de los lentes y movimientos de cámara, mientras el resto de la audiencia decidía con su voto qué cámara debería usarse".
Para el segundo propósito, Davidovich intentó poner en evidencia que "el QUBE funciona por porcentajes, no por cantidades... (por lo que) sus sondeos son de escaso rigor científico. Además, el cuestionario viene dado desde el punto de emisión, por lo que no es difícil seleccionar las respuestas de forma que faciliten el resultado deseado de antemano. Por ejemplo, ante la pregunta ' ¿Qué opina usted de Soho TV? ' se facilita al espectador las cinco respuestas siguientes: 'Me gusta', 'Me gusta mucho', 'Me gusta bastante', 'No me desagrada', 'No está mal'. El sondeo jamás podrá dar como resultado una opinión del tipo 'No lo soporto, es malísimo' porque ya viene censurada desde el principio".
Si bien las producciones en exteriores no fueron características del programa, The Live! Show realizó algunas incursiones en la grabación fuera de los estudios. Cuando fue así, como en The Gap [15]o Saludos Amigos: Dr. Videovich Goes to Texas, el interés por la participación del público se tradujo en entrevistas a los transeúntes sobre aspectos ligados a la televisión, las artes y la utilización del video por parte de los artistas. The Live! Show fue un espacio alternativo en la televisión, que utilizó críticamente el formato televisivo. Hasta 1984, momento en que Jaime Davidovich decidió la finalización del ciclo, sus emisiones fueron el vehículo para la obra de artistas que buscaron cuestionar tanto la distribución limitada del video arte en los circuitos artísticos como la producción estandarizada de la televisión comercial, indiferente a la labor artística. "Eran los comienzos de la televisión por cable -señala Davidovich- y como tal, probablemente la primera y última posibilidad de poder participar en el proceso cultural en su totalidad. Nos daba una pequeña ventana al mundo exterior que nos permitía mostrar nuestra obra, creando una verdadera televisión alternativa".

http://www.proyectovenus.org/ramona/home/anunciantes/interferencia/alonso.html
http://www.jaimedavidovich.com

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